El sábado a las 11:30 ya estábamos entrando en el puerto de Alejandría. Impresionantes vistas de la ciudad que fundó Alejandro Magno.
A continuación comenzó todo el ritual de papeleos con comisarios, aduaneros, policias, agentes de tráfico y demás organismos oficiales. Primero los pasaportes, el Carnet de Passage y papeles del vehículo. Todo correcto pero se quedan el Carnet de Passage. Nos conducen, ya en tierra, a unas oficinas de tráfico del puerto para comprobar numeros de bastidor y contenido de equipajes. Firmita al canto y de nuevo a otras oficinas de tráfico para `pagar las tasas de importación de vehículos y las placas de matrícula (si si, llevo placas egipcias). Pago de 120€ y ya estamos fuera. No nos ha llevado más de 2:15 hacerlo todo. Perfecto!
Salimos de Alejandría sobre las 15:30, Eduard & Ben (4x4), yo y mi montura, y un "fixer" que habían contratado con su propio coche. Aviso de que no tengo combustible para más de 20-30 km y que necesito una gasolinera urgentemente. "Ok, ok" me dicen. Venga, pues p'alante! En exactamente 25 kms me quedo tirado sin gasolina (autonomía comprobada de 550kms). Los colegas y el fixer se marchan a por gasolina mientras yo me quedo desayunando una manzana en una "fabulosa" carretera de circunvalación. En 30 min ya teníamos todo solucionado y, de nuevo, rumbo a El Cairo (226km).
La razón por la que marchamos de Alejandría fue que Eduard tiene un colega en El Cairo (Harm) que trabaja para Heineken y amablemente nos invitó a ver la final de la Champions League en un hotelazo de lujo de el Cairo donde realizan eventos para sus clientes.
Llegamos en aproximadamente 2h y tardamos otra más en cruzar el Cairo y su caótico tráfico.
Eso si, a la entrada de la ciudad nos daban la bienvenida las impresionantes pirámides de Keops y Khufu.
Nos cambiamos rápidamente y entramos en los jardines del hotel donde tenían todo el sarao montado. Impresionante la seguridad del hotel. Aparentemente todo estába montado para la clase alta de El Cairo, y nosotros no podíamos faltar. Sorprendentemente mis siempre elegantes alpargatas negras no son las únicas en la fiesta.
Pantallas gigantes, DJ en directo, animadoras, camareras de impresión, comida deliciosa y barra libre de Heineken. Creo que no podía pedir más...bueno sí, que ganara el Barça!!!
Me acordé mucho de Polvos, César, Ivanete y de Fernando y me tomé unas cuantas birras a vuestra salud...
Terminamos a las 3 de la mañana en casa de Harm dándonos un baño en su jakuzi y contando mil historias que no sabría volver a explicar (mi moto se quedó a buen recaudo en el hotel). Fantástica bienvenida a El Cairo.
Me quedaré en la ciudad tres o cuatro días más. Es un caos completo y siempre hay atascos infernales para llegar de un sitio a otro, pero así es África!
Salut
KMS: 2800
A continuación comenzó todo el ritual de papeleos con comisarios, aduaneros, policias, agentes de tráfico y demás organismos oficiales. Primero los pasaportes, el Carnet de Passage y papeles del vehículo. Todo correcto pero se quedan el Carnet de Passage. Nos conducen, ya en tierra, a unas oficinas de tráfico del puerto para comprobar numeros de bastidor y contenido de equipajes. Firmita al canto y de nuevo a otras oficinas de tráfico para `pagar las tasas de importación de vehículos y las placas de matrícula (si si, llevo placas egipcias). Pago de 120€ y ya estamos fuera. No nos ha llevado más de 2:15 hacerlo todo. Perfecto!
Salimos de Alejandría sobre las 15:30, Eduard & Ben (4x4), yo y mi montura, y un "fixer" que habían contratado con su propio coche. Aviso de que no tengo combustible para más de 20-30 km y que necesito una gasolinera urgentemente. "Ok, ok" me dicen. Venga, pues p'alante! En exactamente 25 kms me quedo tirado sin gasolina (autonomía comprobada de 550kms). Los colegas y el fixer se marchan a por gasolina mientras yo me quedo desayunando una manzana en una "fabulosa" carretera de circunvalación. En 30 min ya teníamos todo solucionado y, de nuevo, rumbo a El Cairo (226km).
La razón por la que marchamos de Alejandría fue que Eduard tiene un colega en El Cairo (Harm) que trabaja para Heineken y amablemente nos invitó a ver la final de la Champions League en un hotelazo de lujo de el Cairo donde realizan eventos para sus clientes.
Llegamos en aproximadamente 2h y tardamos otra más en cruzar el Cairo y su caótico tráfico.
Eso si, a la entrada de la ciudad nos daban la bienvenida las impresionantes pirámides de Keops y Khufu.
Nos cambiamos rápidamente y entramos en los jardines del hotel donde tenían todo el sarao montado. Impresionante la seguridad del hotel. Aparentemente todo estába montado para la clase alta de El Cairo, y nosotros no podíamos faltar. Sorprendentemente mis siempre elegantes alpargatas negras no son las únicas en la fiesta.
Pantallas gigantes, DJ en directo, animadoras, camareras de impresión, comida deliciosa y barra libre de Heineken. Creo que no podía pedir más...bueno sí, que ganara el Barça!!!
Me acordé mucho de Polvos, César, Ivanete y de Fernando y me tomé unas cuantas birras a vuestra salud...
Terminamos a las 3 de la mañana en casa de Harm dándonos un baño en su jakuzi y contando mil historias que no sabría volver a explicar (mi moto se quedó a buen recaudo en el hotel). Fantástica bienvenida a El Cairo.
Me quedaré en la ciudad tres o cuatro días más. Es un caos completo y siempre hay atascos infernales para llegar de un sitio a otro, pero así es África!
Salut
KMS: 2800
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Sin gasolina |
Harm's Hostal, El Cairo |